martes, 6 de julio de 2010

120. El cambio climático: prueba del calentamiento global

Inundaciones en Tabasco. Tomado de blogvecindad.com

Nadie puede negar que el clima últimamente ha estado algo loco. Y es que vemos en las noticias que los huracanes, inundaciones, sequías y cosas por el estilo arrebatan la vida de cientos de personas y destruye todo cuanto encuentran por su paso. Sin embargo, como siempre, hay quienes argumentan que todo esto no es prueba de que la tierra se está calentando por culpa del ser humano. "Claro está - argumentan -, siempre ha habido inundaciones y sequías y lo demás". Y eso es cierto, ya que, por ejemplo, ya en tiempos bíblicos ocurriá sequías, como la que afectó en tiempos de Jacob. Pero ¿verdad que estos episodios de "locura" del clima han aumentado en estos últimos tiempos?

Algunos indican que el calentamiento global es un tongo creado por Estados Unidos para desviar la atención mundial, y hay quienes creen incluso que el calentamiento global es responsabilidad de las hojas de los árboles que caen en otoño y que, al desvanecerse, producen el efecto invernadero.

Pero seamos realistas. El hecho que aumenten las sequías y las inundaciones en un lugar tras otro de nuestro planeta no es por mera casualidad. Es prueba irrefutable del daño que le hemos hecho al planeta. Veamos algunas pruebas.

Inundaciones
Luego de las inundaciones que afectaron a República Checa el 2002 (hace sólo 8 años) "los científicos checos apuntan que las catastróficas inundaciones que [los] han asolado son la consecuencia del calentamiento global y de la incapacidad del paisaje cubierto por una coraza de asfalto de absorber el agua", indica el sitio web radio.cz. En este mismo sitio se indica que la causa principal radica en el efecto invernadero. "Algunos gases funcionan en la atmósfera como los cristales de un invernadero. Los rayos solares pasan por ellos y al llegar a la superficie de la Tierra, la calientan".

Sin embargo, la actividad humana, principalmente desde la revolución industrial, ha contribuido, gracias a la quema de petróleo, carbón y gas natural, a que esta capa aumente de grosor, impidiendo que el calor que nos da el sol escape hacia el universo luego de rebotar en la tierra. Eso explica el aumento de la temperatura de nuestro planeta.

Vemos entonces que, hasta el momento, las hojas de los árboles caídas en el otoño no tienen nada que ver con el calentamiento global.

Inundaciones en Brasil (véase)

Según el profesor Bedrich Moldan que encabeza el Centro para el medio ambiente de la Universidad Carolina, la temperatura más elevada "provoca una mayor evaporación del agua y en la atmósfera hay más vapor. Éste, al condensarse, da origen a lluvias más intensas". Eso explica claramente el por qué tantas inundaciones en estos tiempos. A eso hay que sumarle la erosión de los suelos, debido a la tala indiscriminada de árboles, que hace que la tierra no filtre toda el agua que cae. Para más remate, el ser humano aumenta la superficie ocupada por carreteras, espacios de estacionamiento y calles asfaltadas, provocando así las inundaciones. (Véase el artículo de donde tomé información aquí).

Se ha calculado que en el siglo XX unos 3,2 millones de personas han muerto por este motivo, lo que es más de la mitad de los fallecidos por desastres naturales en el mundo en ese periodo. Un dato no menor, ¿verdad? (tomado de cidta.usal.es)

Las sequías
El sitio web bajalealcalor.org expone lo siguiente: "En los último 20 años se ha registrado la tendencia hacia tormentas más poderosas y hacia períodos de sequía más prolongados. Los científicos ven en ello una prueba de que el cambio climático ya comenzó. El aumento de las temperaturas implica mayor evaporación y una atmósfera más cálida puede retener más humedad; en consecuencia, hay más agua en suspensión que puede caer en forma de lluvias intensas. De la misma manera, las regiones secas pueden perder todavía más humedad si hace más calor; lo que agrava las sequías y la desertificación". Y la evaporación del agua se puede ver claramente en, por ejemplo, el Lago Chad, en África.

Superficie del Lago Chad. Tomado de genciencia.com

Por lo tanto, no es una locura pensar que el cambio climático es justamente provocado por el calentamiento que sufre nuestro planeta. Y eso que no hemos mencionado las sequías, que curiosamente, contribuyen a las inundaciones. ¿Por qué? Como ya se explicaba, las sequías producen una gran cantidad de evaporación de agua (como en el caso del Lago Chad), y esto, a su vez, produce más nubes y, por ende, más lluvia. Es un círculo vicioso que lamentablemente se ve muy difícil de terminar.

El aumento del nivel de agua
Como consecuencia de este desorden climatológico, provocado por el ser humano, "el nivel del mar subió por término medio entre 10 y 12 centímetros durante el siglo XX, y para el año 2100 se prevé una subida adicional de 9 a 88 cm". El sitio bajalealcalor.org explica la razón: "La subida de las temperaturas hace que el volumen del océano se expanda, y la fusión de los glaciares y casquetes polares aumenta el volumen de agua". Como consecuencia, miles de personas arriesgan sus vidas por vivir a orillas del mar, como Nueva York, San Francisco, Cancún, Sao Paulo, y en Chile, ciudades como Arica, Antofagasta, Valparaíso, Talcahuano y Puerto Montt. ¿Verdad que ya no parece un tongo de Estados Unidos?

Para terminar con este artículo, hace ya unas 10 horas que está lloviendo aquí en Concepción, y no ha parado. Y, por favor, vean la intensidad con que cae la lluvia en este pequeño vídeo que preparé. Yo, en mis 20 años de vida, nunca había visto llover de esta forma. Y ojo, que aún hay gente viviendo en carpas producto del terremoto. Hay que tomar conciencia ahora, ¡Ya!

lunes, 5 de julio de 2010

119. Vacaciones Coihaique 2008 | Chile Chico: Patagonia chilena

Trayecto entre Comodoro Rivadavia y Chile Chico

Ya pasamos la mitad de año, y durante hartos días me he estado pensando qué escribir. De hecho, no se me ocurría nada, hasta que, viendo las secciones de mi blog, vi una que tengo en el más absoluto abandono: mis vacaciones a Coihaique 2008. La última vez que publiqué un artículo referente a mis vacaciones fue por allá en enero de 2009, hace más de un año. En esa oportunidad les hablaba del viaje entre Esquel y Comodoro Rivadavia, en la República Argentina. Pues hoy retomaré mi relato, y llegaremos a la Patagonia Chilena, sin lugar a dudas uno de los lugares más hermosos que he visitado en mi vida. Ponte cómodo.

Llegando a Chile Chico: entrada a la Patagonia Chilena
"El Gorosito", Caleta Olivia, Argentina

Como ustedes ya saben, mi fiel diario de vida me acompañó en esas vacaciones, como lo ha hecho durante 7 años. Y así relata lo que pasó ese día y nuestra llegada a Chile.
"Sábado 16 de febrero de 2008.
19:07 horas: ¡Por fin! Hemos vuelto a Chile.
Partimos desde el Hotel Victoria (que nos cobró $90 más que el 2006) rumbo al sur, dejando atrás la ciudad de Comodoro Rivadavia.
En Caleta Olivia destaco un trabajador petrolero gigante en una plazoleta. Nos sacamos fotos allí".
En efecto, aquel trabajador debe medir unos 15 o más metros llamada "El Gorosito" (véase foto de un poco más arriba, haz clic en ella para ampliarla). Cuando habíamos pasado por primera vez por Caleta Olivia (que a estas alturas es puerto), el 2006, aquella imagen no estaba, así que no dudamos en sacarnos fotos allí. A esas alturas el viento patagónico era insoportable, pero no sabíamos lo que nos esperaba cuando nos fuéramos al interior en busca de la frontera con Chile. El relato prosigue:

La Pampa Argentina
"Aquí (Caleta Olivia) nos despedimos del océano Atlántico. Nos comenzamos a internar en la pampa nuevamente. Pico truncado y Koulel Kayke los pasamos de largo. Interesante es el hecho de que Koulel es un pueblo fantasma: calles vacías y casas a medio construir. Sólo dos personas alcanzamos a divisar: un viejito y una señora.
Llegamos a la hora a Las Heras para almorzar a la 1 de la tarde".
En esa ciudad (fantasma como la otra, pero no tanto) nos comimos toda la comida que nos sobraba y que podía ser requisada por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) en la Aduana. El viento era tan fuerte, que tuvimos que almorzar dentro del auto, y el auto se movía debido a las ráfagas de viento. De ahí nos esperaba un largo trayecto hasta Chile Chico. Como ya nos estábamos yendo de Argentina, mi padre se había gastado todo el dinero argentino que le quedaba, así que andábamos sin ni uno. Llegando a Perito Moreno, estábamos con la duda de si íbamos a llegar a Chile con la bencina que le quedaba al auto.

Mis padres en el Lago Buenos Aires.

Sin embargo, un generoso chileno que también andaba por esas latitudes accedió a cambiarnos $100 argentinos. Así pudimos llenar el estanque. Sin embargo, a pesar de que la bencina era en ese entonces muy barata (unos 250 pesos chilenos), el trato que recibimos en la bencinera no fue la mejor. Dejemos que mi diario nos lo cuente.

"Así, llegamos a Los Antiguos, último pueblo de Argentina, a 3 kilómetros de la frontera. Cargamos combustible... pero algo sucedió.... llegamos a la bencinera. Al minuto llega un motociclista argentino al servicentro. El bombero, que durante todo ese rato estuvo hablando por celular, no nos atendía. Cuando por fin se dignó a atender la bencinera, atendió primero al motociclista. Aquí comienza el problema, porque mi padre vio eso y no se quedó callado. (Aquí aprendí a ceder cuando corresponde, para no causar problemas) El diálogo fue más o menos así:

Papá: ¡Oiga, pero si nosotros llegamos primero!
Bombero: Discúlpeme, pero él es argentino y lo atiendo primero.

1ra excusa: Atiende primero al motociclista porque es argentino. ¿Qué tipo de atención es esa? Discriminación pura.

Papá: Pero nada que ver. Se supone que se atiende por orden de llegada, no por nacionalidad
Bombero: Es que me voy a demorar mucho con usted. Querés que te llene el estanque y eso es mucho.

2da excusa: El estanque vacío. O sea, si tú vas sin gasolina, serás atendido al último, porque se demorarán mucho contigo. Además, ¿cómo sabía que, supuestamente, faltaba mucho combustible?

Papá: Tú no sabes cuánto voy a cargar.
Bombero: No poh. Además, yo atiendo, y ni me saludó.
Papá: Pero si estabas hablando por celular.

3era excusa: No lo saludan. Es ridículo, a mi gusto.

En fin, lo bueno es que unos pocos son así. Los argentinos nos trataron súper bien en su país".

En Chile Chico nos alojamos en unas cabañas a la orilla del Lago General Carrera (es el mismo lago Buenos Aires, que cambia de nombre en lado chileno). Al otro día conocimos más aquella ciudad de unos 3mil habitantes. Lo bueno es que nos tocó un buen día. De eso les hablaré en el siguiente artículo... que espero que sea pronto :) ¡Espero sus comentarios!

martes, 29 de junio de 2010

118. El mítico penal de España 82

Hace ya unas semanas comenzó el mundial de futbol FIFA 2010 en Sudáfrica, en el cual Chile fue eliminado ayer ante Brasil, tal cual como hace 12 años en Francia 1998. Y fue inevitable acordarme del penal que ya pasó hace 28 años atrás, el 6 de junio de 1982, cuando Carlos Caszely se perdió un penal ante Austria en el mundial de España. Hasta el día de hoy se recuerda lo sucedido. Aquí les dejo un resumen del penal, que encontré en YouTube.


martes, 8 de junio de 2010

117. Se prohíbe botar basura

¿Curioso no? No hay conciencia de nada
(tomada en calle Suecia casi al llegar
a Av. Grecia, en Hualpén)

viernes, 4 de junio de 2010

116. Viajando con Panchito IV: el puente viejo

Continuamos con esta sección que, aunque no mucha gente la lea, me gusta. Ya hemos viajado por la ciudad donde vivo, Hualpén; por Concepción, mi ciudad natal, el cual incluye Hualpén y otras comunas; y también hablé de las ferias libres, tan comunes acá en Chile. Hoy les contaré acerca de un ícono de Concepción, que era paso obligado para quien visitaba esta linda ciudad. Me refiero al puente viejo.

El puente viejo, único acceso sur a Concepción
El puente viejo, sobre el río Biobío

Originalmente, este puente se llamó Puente Biobío, puesto que cruzaba el gran río Biobío, que está inmediatamente al sur de la ciudad de Concepción. De ahí que se le llame a Concepción "La perla del Biobío". Este antiguo puente se construyó en la década de los 30, inaugurado el año 1943. Constaba de dos pistas, una en cada sentido de tránsito, y una estrecha vereda a cada lado del puente para peatones. Antes de la construcción de este puente, no había ningún otro tipo de puente que uniera ambas riberas del río para vehículos. Sólo existía (y existe hasta hoy) el Puente ferroviario (construido en 1889). Durante tres décadas fue el único puente para vehículos motorizados de la zona, y durante otras tres décadas, convivió junto con el Puente Juan Pablo II, su sucesor, que en un principio se llamó Puente Nuevo.

El Puente viejo. Al fondo el centro de Concepción.

La longitud del Puente Biobío es de 1419 metros, transformándolo en uno de los puentes más largos de Chile (por no decir el más largo) por aquellos años, siendo superado años después por el Puente Juan Pablo II, de 2310 metros.

Soporta terremotos y, tiempo después, se clausura

Después del mega terremoto de 1960, el puente sufrió varios daños.

Otra foto de ese día...

A lo largo de los años este puente se transformó en un ícono de la ciudad. Resistió el terremoto de 1939 de Chillán (que igual afectó Concepción, mientras lo construían), y pudo ser reparado después del mega terremoto del 21 y 22 de mayo de 1960. Aquel terremoto fue el más fuerte de la historia. A decir verdad, fueron una sucesión de terremotos. El 21 de mayo como mínimo 3 terremotos azotaron Concepción, con magnitud de 7,5 grados Richter. Al día siguiente hubo otro en Valdivia de 7,5 grados. Y después, el gran terremoto de 9,5 grados Richter, el más grande jamás registrado en la historia. Afecto a todo el sur de Chile, lo que incluye obviamente a Concepción. Como mencioné anteriormente, el puente fue reparado, debido a algunas fracturas que sufrió (véase las fotos). 

Foto del último día en que estuvo operativo el puente para vehículos (gentileza de pdavid48)

El Puente Biobío (o puente viejo) estuvo operativo durante casi 60 años, hasta que, por motivos de seguridad, el 1 de mayo de 2002 se cerró para tránsito de vehículos. Sólo podían circular peatones. Para ese entonces, ya existía un tercer puente carretero, el Llacolén, funcionando desde el año 2000.

Celebrando año nuevo en el Puente.

Durante mucho tiempo se estuvo discutiendo acerca de qué hacer con este puente. Muchos decían que debían demolerlo para construir uno nuevo y más moderno. Otros indicaban que debían mantenerlo como parte de la historia de la ciudad, y transformarlo en un paseo con locales y otros. Hasta hubo quienes dijeron que podían instalar un faro en el centro del puente. El caso es que este puente nunca se abrió nuevamente para vehículos. Sólo se utilizaba para celebrar años nuevos.

El fin del puente viejo

Así quedó después del 27 de febrero de 2010

El 27 de febrero de 2010 el terremoto de 8.8 grados que sentimos todos nosotros acabó con este puente, con este ícono de los penquistas. El puente se fracturó en varias partes, cayendo al río. 

En las noticias apareció la imagen de cómo quedó el puente.

Luego de varias semanas, se decidió demoler definitivamente el puente, haciéndolo desaparecer. Así termina la historia de este mítico puente, que sobrevivió 73 años hasta que un terremoto terminó por echarlo abajo. Sin embargo, las autoridades aprobaron dejar las entradas norte y sur del puente como recuerdo imborrable de puente que significó en sus tiempos de gloria un impulso a la ciudad y una postal para el resto del país. Aquí les dejo algunas imágenes de la demolición del puente, gentileza del elsur.cl.





En su lugar se construirá el Puente Chacabuco, de 4 vías, dos por cada lado, con veredas para peatones y una ciclovía. Pero nadie olvidará que en ese lugar estuvo el famoso Puente Viejo, emblema de Concepción. Saludos y agradezco de antemano a quienes tomaron estas fotos, que son muchos. :)
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Procedencia de las imágenes:
5: Pantallazo de un vídeo de YouTube: puente viejo Concepcion - YouTube
El resto de las imágenes le doy el crédito a quien le corresponda.